Cortisol: cuando el estrés se refleja en tu piel.

DATOS

• El cortisol es la principal hormona del estrés; se produce en las glándulas suprarrenales.

• Un nivel elevado y sostenido de cortisol puede aumentar la producción de sebo, lo que favorece el acné.

• También debilita la función barrera de la piel, causando resequedad e irritación (fuente: American Academy of Dermatology).

• Estudios muestran que técnicas de respiración profunda y yoga reducen los niveles de cortisol hasta en un 31% tras sesiones regulares (National Center for Biotechnology Information).

Consecuencias visibles

• El estrés no pasa desapercibido: tu piel lo revela. Los niveles altos de cortisol se manifiestan en forma de brotes de acné, enrojecimiento e incluso resequedad, volviendo más frágil la barrera cutánea.

​​Lo que nadie te dice​

• No basta con cremas o tratamientos superficiales. Si tu interior está en caos, tu piel lo refleja. El equilibrio emocional es un paso clave en cualquier rutina de belleza.

El consejo de nuestra cosmiatra

La ciencia lo respalda: las prácticas de respiración consciente ayudan a reducir el cortisol y restablecer el balance. Unos minutos diarios de inhalar y exhalar de forma profunda generan cambios que se ven en el espejo. Desde Zoreli, nuestra experta sugiere incluir ejercicios de respiración cada mañana y explorar la sección de yoga como ritual de bienestar. Es un gesto sencillo con impacto profundo: calma tu mente y transforma tu piel.

Tu piel no es ajena a lo que sientes: es un reflejo honesto de tu estado emocional. El exceso de cortisol puede dejar huellas visibles, pero también es la oportunidad perfecta para reconectar contigo. Incorporar respiración consciente y prácticas de yoga no solo calma la mente, también devuelve equilibrio y luminosidad al rostro. Al final, el mayor secreto de belleza no está en un frasco, sino en tu capacidad de encontrar paz interior.